Con la creciente presencia de la inteligencia artificial en las aulas universitarias, algunos profesores están discutiendo los beneficios y desventajas de que los estudiantes utilicen esta tecnología en sus proyectos de investigación.
Recientemente, un profesor de Halifax ha prohibido el uso de inteligencia artificial, como el modelo de lenguaje ChatGPT, en sus clases. Según él, la inteligencia artificial puede excluir información importante y limitar los resultados de búsqueda a contenido que refuerza ciertos puntos de vista.
Ajay Parasram, profesor de historia y estudios de desarrollo internacional en la Universidad de Dalhousie, argumenta que si bien la inteligencia artificial puede facilitar el proceso de descubrimiento, también puede perjudicar la experiencia de aprendizaje de los estudiantes, ya que les impide ejercitar el pensamiento crítico.
Por otro lado, otros profesores, como Sharon Lauricella de la Universidad Tecnológica de Ontario, alientan a sus alumnos a utilizar herramientas de inteligencia artificial en sus investigaciones, pero también hacen hincapié en la importancia de enseñarles cómo utilizarlas correctamente.
Si bien algunos modelos de inteligencia artificial pueden proporcionar información actualizada y ayudar en el resumen de contenido, los profesores enfatizan que no deben reemplazar el pensamiento crítico y la investigación tradicional.
En resumen, los profesores están divididos en cuanto al uso de la inteligencia artificial en las clases universitarias, reconociendo tanto sus beneficios como sus limitaciones. Sin embargo, todos coinciden en la importancia de enseñar a los estudiantes a utilizar correctamente esta tecnología y a complementarla con el pensamiento crítico.
