El cambio climático está teniendo un impacto global en la movilidad de las personas, según un informe del Banco Mundial. Se estima que 251 millones podrían verse obligados a migrar antes de 2050.
En Senegal, el cambio climático ya está afectando la migración. Un proyecto de investigación reveló la complejidad de la relación entre ambos fenómenos. Los efectos del cambio climático pueden llevar a la emigración, pero también dificultarla.
Senegal es uno de los países más vulnerables al cambio climático, ocupando el puesto 137 en términos de vulnerabilidad climática en 2021. La población senegalesa ha enfrentado durante mucho tiempo condiciones ambientales difíciles y ha integrado la movilidad en su cultura.
En Senegal, agricultores, pastores y pescadores se ven afectados por la falta de agua, la desertificación y la sobrepesca. La emigración a países como España involucra a una diáspora diversa, que incluye a jóvenes urbanos en busca de mejores oportunidades.
El cambio climático también está contribuyendo a la saturación de las ciudades africanas, como Dakar, con un crecimiento descontrolado que precariza las condiciones de vida. Aunque la emigración no se debe solo al cambio climático, este factor agrava una situación ya delicada.
Es crucial comprender los cambios provocados por el cambio climático y promover políticas que anticipen y mitiguen sus efectos en la migración. Cerrar fronteras no es una solución efectiva, y no abordar el cambio climático puede resultar aún más costoso y peligroso en el futuro.
