El presidente del PRI y el periodista Carlos Loret de Mola condenaron el gobierno ecuatoriano por el asalto a la Embajada mexicana en Quito, donde se pretendía detener al exvicepresidente Jorge Glas. Ambos consideran que se trata de una grave violación a la soberanía y un atropello injustificable. Moreno y Loret de Mola coincidieron en que el gobierno de México cuenta con el respaldo nacional para responder a esta acción que calificaron como inadmisible y desastroso para las relaciones internacionales. La detención de Glas en la sede diplomática representó un precedente negativo en materia de inviolabilidad establecida en la Convención de Viena, según las declaraciones de ambos personajes.
El líder priista enfatizó que este tipo de acciones generan un clima de tensión y desconfianza entre los países, mientras que el comunicador mexicano subrayó que Ecuador debe asumir las consecuencias de su actuar. Asimismo, ambos pidieron una respuesta contundente por parte del gobierno mexicano para garantizar que este tipo de violaciones a la soberanía no se vuelvan a repetir en el futuro. Las críticas por el allanamiento a la Embajada de México han generado reacciones en la comunidad internacional, donde se espera una postura firme de las autoridades ecuatorianas frente a este incidente que ha puesto en entredicho el respeto a las normas internacionales en materia de relaciones diplomáticas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha asegurado que México no permitirá este tipo de acciones violentas sobre su territorio y ha solicitado una disculpa por parte del gobierno ecuatoriano. Por su parte, el mandatario ecuatoriano Daniel Noboa ha señalado que el asalto a la Embajada mexicana fue una medida necesaria para garantizar la seguridad nacional. Ante este escenario, la comunidad internacional ha manifestado su preocupación por la escalada de tensiones entre ambos países, y se espera que pronto se pueda restablecer la normalidad en las relaciones diplomáticas entre Ecuador y México.
En tanto, las autoridades ecuatorianas han iniciado una investigación para determinar las responsabilidades por el allanamiento a la Embajada de México en Quito y la detención del exvicepresidente Jorge Glas. Mientras tanto, en México se han convocado a protestas para exigir justicia y respeto a la soberanía de la sede diplomática mexicana en el país sudamericano. La reacción internacional no se ha hecho esperar, con diversos países manifestando su apoyo a México y condenando la violación a la inviolabilidad de una misión diplomática en territorio extranjero.
En este contexto, se espera que las autoridades de ambos países puedan llegar a una solución diplomática que permita resolver este conflicto de manera pacífica y respetuosa. La comunidad internacional ha llamado a la calma y al diálogo entre Ecuador y México para evitar una escalada de tensiones que pueda perjudicar las relaciones bilaterales y la paz en la región. Por su parte, la opinión pública en México se mantiene atenta a los próximos pasos que dará el gobierno mexicano frente a este incidente que ha generado controversia a nivel internacional.
