La distribuidora de productos químicos en Mato Grosso do Sul que tenía 231 toneladas de acetato de etilo incautadas por la PF (Policía Federal) en marzo del año pasado, en Corumbá, a 444 kilómetros de la capital, pidió la liberación de la mercadería. El pedido de restitución fue negado por la Undécima Sala del TRF (Tribunal Regional Federal) de la 3ª Región este jueves (9). El material incautado fue valorado en R$ 3 millones.
El juez federal José Lunardelli consideró que la solicitud de liberación de los bienes “no cumplía con los requisitos necesarios para el otorgamiento de la tutela (medida cautelar), tales como daño grave o difícil reparación de los bienes incautados”.
El producto incautado, acetato de etilo, es de uso común en la industria de pinturas, farmacéutica y cosmética, pero en su momento sería utilizado en la refinación de cocaína. El ponente afirmó que “el decomiso se produjo por indicios y no por la mera presunción de un delito, como la naturaleza del producto, ausencia de depósitos acordes con el objeto social de la empresa y la actividad que desarrolla”.
La empresa esgrimió el argumento de que importa y comercializa el producto y cuenta con autorizaciones de organismos bolivianos, además de sostener que el trámite de exportación fue regular.
El 1º Juzgado Federal de Corumbá ya había desestimado el pedido por infundado, pero la empresa apeló ante el TRF3, afirmando que utilizaba el químico para fabricar pinturas y barnices. Además, presentó el argumento de que cuenta con sede administrativa y depósito para depósito.
El juez federal consideró que aún es necesario profundizar las investigaciones para concluir si la empresa será multada y el destino de los productos incautados.
“La investigación policial se encuentra aún en una etapa incipiente, por lo que mantener la salvaguarda de los bienes resulta fundamental para demostrar la materialidad y autoría delictiva, así como para asegurar la utilidad de cualquier condena en un proceso penal”, concluyó el magistrado.
La incautación fue valorada en BRL 3 millones
La detención se produjo el día 18 de marzo de 2022 y liberado el 21 del mismo mes por la Policía Federal, que informó que las 231 toneladas de acetato transportadas en cinco camiones al patio de la empresa provendrían de una empresa proveedora en São Paulo.
El material estaría destinado a una empresa boliviana ubicada en la ciudad de Santa Cruz de La Sierra. Tras el decomiso, la policía encontró irregularidades en el transporte y recepción del cargamento, además de sospechas de que la empresa compraba el producto en Bolivia, lo que podría ser utilizado para desviar el material para refinar cocaína en territorio vecino.
Según expertos criminalistas de la PF, el acetato de etilo está presente en más del 87% de las muestras de cocaína incautadas en Brasil. Nadie fue arrestado.
