Buscado desde el pasado domingo 7 de enero, Gilmar Urbano Rufim, de 50 años, fue encontrado muerto este miércoles (10) bajo un árbol en Assentamento da Aldeia, cerca de Bataguassu, ciudad situada en la frontera con el estado de Sao Paulo. Habitante de Campo Grande, Gilmar desapareció durante una visita a su familia en la finca, una zona rural de la ciudad.
La muerte fue confirmada por su hijo, Gean Lucas. «Recurrimos a los medios de comunicación para obtener más información, sabíamos que no caminaría muy lejos del asentamiento, especialmente porque bebía», dijo. El hombre será enterrado en Bataguassu, municipio donde nació. Al momento de publicación del artículo, la familia desconocía la causa de la muerte de Gilmar.
Según el informe policial, Gilmar se encontraba en la propiedad rural donde vive su madre cuando, alrededor de las 16.30, salió para dirigirse a una finca donde se siembra soja. Desde entonces no se le ha vuelto a ver y no ha dado ninguna noticia a su familia.
En el sitio web Campo Grande News, la hija del hombre, Bruna do Carmo Rufino, de 27 años, dijo que Gilmar vestía pantalones cortos beige y estaba sin camisa cuando salió de la casa. También tenía una gorra negra en la cabeza y no tenía ningún tatuaje en el cuerpo.
