En un torneo barrial celebrado en Ñemby, un partido terminó en un violento enfrentamiento entre jugadores. Uno de los futbolistas sufrió lesiones después de recibir patadas en la cabeza y decidió denunciar el incidente para prevenir futuros episodios similares.
El juego, parte del «Torneo del Barrio Rincón de Ñemby» y llevado a cabo en la cancha del club Sol Primavera, se tornó violento cuando una falta provocó discusiones y empujones entre los jugadores de ambos equipos.
Eduardo Gómez, uno de los agredidos, contó que la situación se descontroló al intentar defender a un compañero. Fue derribado y, ya en el suelo, recibió varias patadas en la cabeza, dejándole mareos y dolor persistente. Según Gómez, quien identificó a Andrés Figueroa como el principal agresor, «me atacaron entre siete u ocho personas y todo quedó registrado en video.» Tras ser atendido médicamente, Gómez denunció el hecho en la comisaría.
El incidente fue grabado por un espectador y el video se difundió rápidamente, causando preocupación en la comunidad y entre los organizadores del torneo.
Gómez denunció para evitar que incidentes similares sucedan en otros partidos barriales, esperando que no se repitan en otras canchas. El «Torneo Puku» es conocido por reunir equipos de distintos barrios de Ñemby cada fin de semana, y aunque este tipo de incidentes no había sucedido antes, los participantes admitieron la falta de presencia policial durante el enfrentamiento.
