“Ellos me dijeron que no tenían calefacción y me pidieron que compre la estufa. Nosotros compramos porque ese lunes que mi bebé ingresó hacía mucho frío. Desde el primer momento nosotros le dijimos que la estufa estaba muy cerca, que su cara estaba muy roja y muy caliente”, comentó Carmen Ojeda, madre del niño.
“El viernes su cara estaba ya irreconocible un lado, pero los doctores me dicen que no es una quemadura. Insisten con eso, pero al final nos pidieron una pomada que es para quemaduras y eso le están poniendo por todas las partes que se quemó”.
La señora Ojeda indicó que en estos momentos se encuentra con temor a represalias, puesto que denunció el hecho en la fiscalía, luego de que los doctores los hayan denunciado ante servicios sociales. “Ellos denunciaron que nosotros entramos y les atropellamos, pero luego dimos nuestra versión de lo ocurrido y no nos pudieron dar respuestas”
