El obispo encabezó la misa de ayer en la Catedral de Fuerte Olimpo para conmemorar el Día de la Juventud. Durante su sermón, destacó que los jóvenes son fundamentales para la familia, la comunidad y el país. Subrayó la importancia de invertir en ellos para un futuro mejor, especialmente mejorando las condiciones en Alto Paraguay.
Además, criticó la falta de avance en los caminos del área, solicitando su asfaltado. Habló sobre la necesidad de reflexionar sobre los dones que recibimos y cómo podemos usarlos para contribuir al crecimiento del Reino de Dios. Enfatizó que la justicia debe ser auténtica y servicial, sin ser usada para beneficio personal. Recalcó que las autoridades deben actuar con imparcialidad.
Propuso un diálogo entre autoridades y ciudadanos para evaluar qué ayuda y qué daña a la sociedad, cuestionando la situación en la comunidad y el país. Lamentó los escándalos políticos y las amenazas para obtener ventajas de algunos poderes del Estado, instando a investigar las coimas y corruptelas en el gobierno. Señaló que la impunidad lleva al desorden social.
El obispo también se refirió a los constantes casos de robo de ganado en el Chaco, que afectan a los pequeños ganaderos, minando el desarrollo económico de la región. Demandó justicia efectiva y caminos adecuados para atraer inversión y desarrollo.
Criticó la falta de acción de las autoridades judiciales, quienes a menudo no están presentes o no atienden a las víctimas de estos robos. Finalmente, denunció que la inseguridad está alejando a los potenciales inversores, lo que afecta tanto a ricos como a pobres.
