La mayoría cartista, con apoyo de otros colorados y liberocartistas, utilizó su ventaja temporal en el Senado para reelegir a Basilio “Bachi” Núñez como presidente del Congreso hasta junio de 2028. Los opositores tacharon esta acción como un golpe a la democracia, señalando que busca “perpetuar” a Núñez en el cargo. Honor Colorado realizó esta estrategia para evitar posibles deserciones durante la campaña municipal de 2026.
Aprovechando que la población está distraída por la clasificación de Paraguay al Mundial de fútbol, el cartismo reunió votos en el Senado y logró ayer, en sesión ordinaria, la reelección de Basilio “Bachi” Núñez (ANR, HC) como titular del Congreso hasta el 30 de junio de 2028. El cartismo quiere asegurar el control del Senado hasta 2028 para dar estabilidad al criticado gobierno de Santiago Peña. De esta manera, Honor Colorado coloca a un leal en la línea de sucesión presidencial ante cualquier eventualidad política.
La gestión de Núñez ha sido cuestionada por conceder beneficios a sus leales, licitaciones criticadas y designación de familiares, como el nombramiento de Matías Sebastián López Molinas, hijo del intendente de Villa Hayes, Luis López (ANR, HC), como funcionario en el Centro Cultural de la República El Cabildo.
Bachi consiguió ayer 29 votos de 45 senadores para obtener un nuevo período hasta junio de 2028. Obtuvo 18 votos cartistas, cinco de colorados independientes y seis liberocartistas. Sorprendentemente, Líder Amarilla también apoyó.
Según los antecedentes, Bachi contaba con los 17 votos de su bancada y el suyo, sumando 18. También aseguraba cinco votos de liberocartistas, alcanzando una mayoría absoluta de 23 votos. Sin embargo, inesperadamente recibió el respaldo de cinco colorados «independientes»: Lilian y Arnaldo Samaniego, Juan Afara, Colym Soroka y Ramón Retamozo. Óscar “Cachito” Salomón, quien se unió recientemente al cartismo, votó en contra con un discurso de reclamo. Además, Luis Pettengill de Fuerza Republicana se abstuvo, lo que también llamó la atención.
