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Este miércoles se realizó una necropsia al cuerpo hallado en el Cerro Cristo Rey de Caacupé, sin embargo, el fiscal que investiga la desaparición de María Ramona Cardozo, Gedeon Escobar, dijo que la falta del cráneo dificulta su identificación. Aclaró que tanto el cráneo, como los miembros superiores, aún no fueron encontrados.

“Se pudo determinar ciertas características morfológicas en cuanto a las extremidades inferiores, también de que el cuerpo corresponde a una persona de sexo femenino, de estatura promedio entre 1,55 y 1,60 metros, con un peso promedio de 58 kilos. La identificación en sí científicamente aún no la tenemos, porque no tenemos la cabeza, el cráneo, a fin de poder realizar la comparación con las placas dentarias”, alegó.

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Afirmó que continuarán en la búsqueda de las otras partes del cuerpo que todavía faltan, así como también realizarán las pruebas de ADN, las cuales tardan más para poder determinar con exactitud y precisión científica a quién corresponderían los huesos cadavéricos hallados en el Cerro Cristo Rey de Caacupé.

Huesos corresponderían a mujer desaparecida

Según el fiscal Gedeon Escobar, para los investigadores en un 99% creen que los huesos corresponden a la señora María Ramona Cardozo, pero hasta no tener esa certeza científica, alegó que sería muy irresponsable de su parte dar esa afirmación.

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Consultado sobre en que se basaba para determinar que los restos pertenecerían a María Ramona, dijo que se debía a conversaciones con los familiares, quienes dieron ciertas características fisiológicas en cuanto a los miembros inferiores del cuerpo de la mujer desaparecida.

¿Qué pasó del tercer supuesto implicado?

Ante la versión de un supuesto tercer implicado, Escobar explicó que tras la desaparición de María Ramona, los familiares la llamaron a su número de teléfono el mismo día que había desaparecido.

El domingo, la hermana recibió un mensaje de un número de celular, en el que una persona se identificó como el novio de María Ramona, que iban a tener un bebé, que estaba bien, y que la dejen de molestar. A partir de ese momento, la comitiva fiscal requirió información sobre el número telefónico, la cual fue habilitada por una persona con el nombre de Isidoro González, sin embargo, dicha línea nunca fue ubicada en el lugar donde se encontraron los restos.

“Esa información a nosotros nos llega el día jueves. El martes, cuando inicialmente Víctor se presentó en su lugar de trabajo, para poder aclarar la situación, ordeno yo su traslado hasta la unidad fiscal de emboscada, viene y conversamos, y él ahí menciona una tercera persona”, agregó.

Cambio de nombre tras ver carpeta fiscal

El fiscal contó que le mostraron a Victor Cantero una foto en la que se lo ve con María Ramona en el cruce de San Bernardino, a lo que el interrogado confirmó que son ellos. Cantero está imputado por supuesto abuso sexual en personas indefensas y recluido en el penal Padre de la Vega, de la ciudad de Emboscada, de manera preventiva.

“Y le digo, ¿ella se fue contigo? ¿Y dónde está? Y ahí me dice que él la llevó junto a su novio, y le pregunto, ¿y quién es su novio? Y me da un nombre, pero no Isidoro González, otro nombre, totalmente diferente”, precisó el fiscal.

Contó que el jueves, al tomarle la declaración indagatoria, Cantero menciona el nombre que dijo el martes, pero al tener acceso a la carpeta, donde figuran todas las pruebas, vio el nombre de Isidoro González, por lo que cambió el nombre del supuesto tercer implicado, al de Isidoro González.

No descartan suplantación de identidad

El fiscal resaltó que se debe tener en cuenta que Víctor Cantero trabajó casi 23 años en el Departamento de Identificaciones de la Policía Nacional, y cuando allanaron su casa, encontraron varias carpetas con las que fácilmente podrían acceder a cualquier documento de cualquier persona.

“En ese sentido, nosotros tenemos también la testifical de varios testigos que colocan a Víctor y a María Ramona esa tarde del 1 de julio en el cerro Cristo Rey. Solamente a ellos dos”, aseveró el agente.

Dijo que los testigos que viajaron en el mismo colectivo que Cantero y Cardozo, refieren que estaban solos, lo cual contradice la versión de Cantero sobre la tercera persona supuestamente involucrada. Una vez que llegaron a Caacupé, subieron a un taxi y el taxi les llevó hasta la entrada del cerro Cristo Rey, según el relato fiscal.

Imposible determinar embarazo

Según el agente fiscal, es imposible determinar si la mujer de quien serían los restos hallados estaba en gestación de un bebé, debido a que el mismo fue incinerado.

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“Imposible es determinar, porque justamente, la parte que fue quemada es el tórax y el abdomen, el estómago. No existe útero, está todo quemado”, sentenció.

Fuente original


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