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¡Atención, atención! Las elecciones están a la vuelta de la esquina y los candidatos comienzan a hacer sus promesas electorales. Pero, ¿qué pasa cuando esas promesas son tan descabelladas que parecen sacadas de una comedia? Ese es el caso de Abel González, quien ha prometido a los electores en san Pedro y Concepción, la mísera suma de $50.000 y un pack de cervezas frías a cambio de sus votos. ¡Sí, has leído bien! ¿Quieres saber más? Sigue leyendo.


Esto es un claro ejemplo de falta de respeto total hacia el electorado y ausencia de propuestas claras que puedan convencer al ciudadano para que lo vuelvan a elegir como Senador de la república del Paraguay, cargo que está ocupando actualmente, gracias a la renuncia de uno de los Legisladores electos por el pueblo, y él asumió como suplente.

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Abel González: Promete $50.000 y Cervezas a Electores

Abel González, candidato al «recutu» en el Senado, está haciendo una promesa que parece sacada de un sueño. ¿A quién no le gustaría recibir una suma de $50.000 y una caja de cervezas frías? Sin embargo, esto es una promesa que nunca debería hacerse. El ofrecer dinero y bebidas alcohólicas por un voto no solo es ilegal, sino también inmoral. Abel González debería saber que el voto es un derecho ciudadano y no algo que se pueda comprar.

¡Vota por Mí y Celebra con Cervezas Frías!

Abel González, parece estar convencido de que la mejor forma de ganar votos es ofreciendo dinero y cervezas frías. ¿Pero qué pasa después de que los votantes hayan aceptado su oferta? ¿Cómo se asegura de que realmente voten por él? ¿Y qué sucede con la integridad de la elección? Ofrecer incentivos por un voto es una práctica sucia y poco ética que solo beneficia a los políticos corruptos, inescrupulosos, ambiciosos y egoístas.

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«Chiquito Vale» se Ríe de las Elecciones y de sus Electores

Abel González está haciendo una burla de las elecciones y de sus electores al ofrecer incentivos ilegales para ganar votos.

Si queremos una sociedad justa y equitativa, es fundamental que estas prácticas sean condenadas y penalizadas. La venta de votos es una forma de corrupción que socava los fundamentos de la democracia y debilita la representatividad ciudadana. Los ciudadanos deben votar libremente, en conciencia y sin presiones externas.

La oferta de Abel González es un claro ejemplo de lo que no debe ser una elección justa y democrática. No podemos permitir que nuestros votos sean comprados y vendidos como si fueran una mercancía. La democracia es un proceso serio y comprometido con el bienestar de la sociedad en su conjunto. Esperamos que este tipo de comportamiento sea rechazado por la ciudadanía y que los políticos se centren en ofrecer soluciones reales y sostenibles.

¡Recuerda que tu voto es tu voz y que debes usarla con responsabilidad y sabiduría!

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