La reunión entre el Ministerio de Trabajo, la Federación de Trabajadores del Transporte y el Viceministerio de Transporte nuevamente se aplazó sin cancelar la huelga de conductores prevista para el 3 y 4 de septiembre.
A pesar de que las autoridades mencionaron un “principio de acuerdo” sobre algunas demandas, los trabajadores insisten en que mantendrán la huelga hasta que haya un acta que formalice los puntos acordados. Los conductores desean documentar los cambios propuestos al proyecto de reforma del transporte público, que será analizado mañana en el Senado.
Tras más de tres horas de diálogo, el viceministro de Trabajo, César Segovia, informó que hubo un consenso preliminar en tres temas: la reabsorción del 100% de los trabajadores afectados por la reforma, detallando la relación con las patronales en el nuevo esquema de transporte, y asegurando el derecho a huelga en la normativa laboral, rechazando que el servicio de transporte sea considerado imprescindible.
Segovia, junto al viceministro de Transporte Emiliano Fernández, indicó que el acuerdo debe formalizarse pronto y que existen posibilidades de cancelar la huelga, pero la reunión continúa pospuesta. Fernández señaló que buscan asegurar empleo para los conductores y evitar interrupciones en el servicio. No obstante, no detalló cómo se establecerán las relaciones contractuales.
Gerardo Giménez, presidente de Fetrat, aclaró que la huelga sigue en pie. Los trabajadores presentarán su propuesta de acta, que será evaluada antes de decidir. Giménez expresó preocupaciones sobre el procedimiento en el Senado que limita cambios al proyecto y teme que sus propuestas no sean consideradas.
La mesa tripartita se reunirá nuevamente con el objetivo de finalizar un documento que brinde certidumbre a los trabajadores y tranquilidad a los usuarios, en medio de la inminente discusión de la reforma en el Senado.
