Evo Morales niega acusaciones de abuso infantil en su familia.
El expresidente de Bolivia, Evo Morales, se defendió de acusaciones de abuso infantil reactivadas por el Ministerio Público. Morales negó los cargos en una conferencia de prensa en el Chapare, su bastión político.
Morales criticó al presidente boliviano, Luis Arce, por involucrar a su familia en conflictos políticos. Recordó que ya había sido acusado y absuelto de la misma acusación en 2019.
El expresidente denunció un intento de detención por parte del Gobierno boliviano el 1 de octubre. Agradeció a una jueza por anular una orden de aprehensión en su contra, debido a irregularidades en el proceso.
Morales rechazó la posibilidad de ser extraditado a Estados Unidos y denunció una supuesta trama para incriminarlo en tráfico de drogas. Alertó sobre posibles repercusiones políticas en Bolivia.
El Grupo de Puebla expresó su apoyo a Morales ante las acusaciones legales en su contra. Mostró encuestas donde Morales lidera la intención de voto para las elecciones del próximo año.
Morales atribuyó las acusaciones en su contra a su éxito político y a la caída de su rival, Arce, en las encuestas. Denunció una campaña sucia en su contra y la oposición de derecha a Arce contra él.
El expresidente reiteró que las acusaciones en su contra son falsas y que no pueden juzgarlo dos veces por el mismo delito según la ley boliviana. Criticó la judicialización de la política en su contra.
Morales se mantuvo firme en su defensa y aseguró que continuará luchando contra las acusaciones en su contra. El proceso legal en su contra está siendo evaluado por el Tribunal Constitucional.
