Competencia política entre Lula y Bolsonaro en elecciones brasileñas
Más de 155 millones de brasileños están listos para elegir a concejales y alcalde este domingo. Las elecciones locales tienen un trasfondo político nacional, con Lula y Bolsonaro como figuras clave. A pesar del crecimiento económico, la popularidad de Lula no se refleja en las encuestas, mientras que Bolsonaro busca mantener la fuerza de la extrema derecha y prepararse para las elecciones generales.
La economía brasileña está en alza, con un PIB estimado en crecimiento del 3,2%, baja inflación y desempleo en su nivel más bajo en 12 años. A pesar de esto, la popularidad de Lula ha caído y solo el 32% de la población valora bien su gestión. La comunicación y las redes sociales juegan un papel clave en esta percepción.
La diversidad de partidos en Brasil dificulta predecir un favorito claro entre las candidaturas de Lula y Bolsonaro. Sin embargo, las encuestas muestran una ventaja para los candidatos respaldados por Bolsonaro en varias ciudades. La derecha ha dominado las últimas elecciones locales y ese patrón se espera que se repita este año, reflejando la composición conservadora del Congreso Nacional.
El expresidente Bolsonaro, inhabilitado para presentarse hasta 2030, busca mantener su influencia en las elecciones apoyando candidatos de derecha. Por otro lado, Lula respalda a figuras de izquierda como Guilherme Boulos en São Paulo, aunque su victoria enfrenta desafíos en una posible segunda vuelta.
El exentrenador Pablo Marçal surge como una posible sorpresa en las elecciones, con un discurso provocador y un fuerte dominio de Internet que atrae a parte de los seguidores de Bolsonaro. Su candidatura desafía el dominio del bolsonarismo en la derecha brasileña y plantea interrogantes sobre el futuro político del país.
Las elecciones municipales se presentan como un termómetro para las generales de 2026, con un panorama incierto sobre el futuro político del país. Los resultados determinarán si la extrema derecha brasileña tiene nuevos líderes que puedan competir contra el bolsonarismo o si su influencia se reduce a una anécdota pasajera en la política nacional.
