Un joven detenido durante la marcha de la «Generación Z» denunció que fue arrestado arbitrariamente «por mirar mal a un policía». Describió cómo fue sometido con golpes y tratado como un delincuente peligroso, señalando que esta experiencia cambió su vida.
Hugo Cabrera, uno de los 28 manifestantes arrestados, compartió en redes su relato sobre lo ocurrido la noche del 28 de septiembre. Según él, la represión policial fue repentina y violenta. Intentó refugiarse junto a un grupo en una estación de servicio para evitar a la policía, pero un jefe policial les ordenó irse.
Cabrera afirmó que al obedecer, su mirada fue vista como un desafío por un oficial. «Por mirarle mal a un policía me detuvieron, así de arbitrario». Fue sometido por agentes que lo derribaron antes de esposarlo y llevarlo a una patrullera.
Fue trasladado a la Agrupación Especializada con otros tres manifestantes, permaneciendo detenido casi 24 horas. El joven expresó que en ese momento no sintió miedo, pero ahora le preocupa la justificación de la represión, la indiferencia social y el retorno a tiempos oscuros que no vivió, pero teme experimentar.
