El Ministerio de Salud Pública acumula una deuda de aproximadamente 350 millones de dólares con empresas farmacéuticas por la provisión de insumos y medicamentos. Esta información fue presentada este lunes a la Comisión Bicameral de Presupuesto del Congreso.
La ministra de Salud Pública, María Teresa Barán, asistió a una audiencia informativa ante dicha comisión para explicar los detalles del presupuesto asignado a su cartera para el año fiscal 2026. El presupuesto asciende a más de 10,1 billones de guaraníes (equivalentes a 1.290 millones de dólares), lo que representa un incremento del 4,8% con respecto al presupuesto inicial de 2025.
Durante su presentación, la ministra destacó planes como el aumento del presupuesto para el Instituto Nacional del Cáncer (Incan), el proceso de contratación de personal médico y la mejora de la atención a la población a través de las unidades de salud familiar.
Se mencionó que habrá recortes en hospitales especializados y que se solicitarán ampliaciones presupuestarias para el próximo año, en colaboración con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Varios legisladores criticaron la reducción de presupuesto en algunos sectores de salud, enfatizando la necesidad urgente de solucionar problemas para mejorar la atención a los ciudadanos, en lugar de esperar a una ampliación presupuestaria.
La ministra fue cuestionada sobre la deuda actual, confirmando que oscila entre 300 y 350 millones de dólares. Aclaró que el pago a proveedores se hace de manera proporcional y que las deudas persisten de una administración a otra, justificando así los compromisos pendientes.
A finales de 2023, el Parlamento aprobó la emisión de bonos por 600 millones de dólares para cubrir lo que se denominó «deuda heredada» del anterior gobierno, que incluía las obligaciones de Salud Pública con proveedores de insumos y medicamentos. A pesar de estas cancelaciones, las deudas continúan y vuelven a incrementarse.
