Los productores de caña de azúcar de Mauricio José Troche protestaron este viernes frente a la planta de producción de alcohol de Petropar, demandando avances en el proyecto para completar la instalación del nuevo tren de molienda. Los trabajadores advirtieron que podrían volver a bloquear rutas si no reciben las respuestas prometidas por el Gobierno.
Los agricultores insistieron en que Petropar debe cumplir con el acuerdo firmado el 8 de mayo, que debía presentar un proyecto ejecutivo en 30 días para finalizar la obra del tren de molienda. Han pasado casi cuatro meses sin progresos, lo que ha causado frustración entre los productores, quienes se manifestaron frente a la planta estatal de alcohol.
El descontento aumentó porque, mientras protestaban, la vieja maquinaria, con más de 40 años, sufrió fallas técnicas. Esto subraya la urgencia de contar con el nuevo tren de molienda, ya que las constantes fallas provocan la acumulación de toneladas de caña en riesgo de perderse.
Los productores recordaron que el acuerdo fue firmado en presencia del presidente de la República, Santiago Peña, y de Eddie Jara, líder de Petropar, lo cual generó expectativas de resolver un problema de décadas. Sin embargo, lamentan que hasta ahora solo han recibido respuestas vagas.
Cristhian Fonseca, presidente de la Asociación de Cañicultores de Mauricio José Troche, mencionó que la paciencia del sector se está agotando y que no descartan volver a tomar medidas drásticas, como cerrar rutas nuevamente. Dijo que ya realizaron una movilización de 12 días soportando frío y lluvia, confiando en las promesas presidenciales.
La zafra de 2025 comenzó con incertidumbre y retrasos, al igual que en años anteriores. Según Fonseca, ya se ha interrumpido el ingreso de materia prima debido a que el viejo tren de molienda no resiste el trabajo.
En abril, el principal reclamo fue completar el montaje del nuevo tren, cuyas piezas han estado guardadas por años en la planta. El Gobierno señaló que el proyecto original tenía fallas y necesitaba una nueva adenda de unos USD 25 millones.
El retraso no solo implica pérdidas económicas, sino también perjuicios para toda la región de influencia de Troche, donde miles de familias dependen de la zafra. Los productores calculan que la pérdida podría acercarse al 50% debido a la sequía y las heladas recientes.
La Asociación de Cañicultores destacó que los compromisos de Petropar eran claros y con plazos definidos, pero hasta hoy no ha habido avances concretos. La única certeza es que el ingenio sigue operando con maquinaria obsoleta.
