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La salud visual en niños es crucial para su desarrollo y aprendizaje. Detectar a tiempo problemas visuales es clave para mejorar su calidad de vida y rendimiento escolar. Es recomendable realizar controles oftalmológicos periódicos, especialmente si el niño tiene dificultades para leer, se acerca mucho a las pantallas o se queja de dolores de cabeza.

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Para proteger la vista de los niños, se aconseja limitar el uso de pantallas y fomentar actividades al aire libre, ya que la luz natural es beneficiosa para los ojos. Asimismo, es importante asegurar una buena iluminación para actividades como la lectura, evitando la fatiga ocular y mejorando la concentración. Proteger los ojos del sol es esencial, utilizándose gafas de sol con filtro UV al aire libre.

Una alimentación saludable, rica en frutas y verduras con vitamina A y antioxidantes, contribuye a mantener una buena visión en el tiempo. La prevención juega un papel fundamental para que los niños crezcan con una visión saludable y sin complicaciones. Cuidemos la salud visual de los más pequeños para que puedan ver el mundo con claridad y disfrutar de una buena calidad de vida.